Tercer viaje al Reino de la Fantasía.

Geronimo, contento porque era el primer día de primavera,
trabajaba en su editorial, pensando en si iba a llamar a su familia para cenar en una pizzería.

Benjamín, el sobrino de Geronimo, entró corriendo hacia Geronimo, pidiéndole si podía llamar a su familia para comer pizza en su casa. Geronimo, extrañado por su idea, aceptó ya que lo dos querían comer pizza con su familia y Geronimo hace todo lo que le pide Benjamín porque lo quiere mucho.

Geronimo llamó a toda su familia y cenaron muchísima pizza.
Geronimo, al despedirse de sus familiares al terminar de cenar, se fue a la cama. Pero no podía dormir de tanto comer pizza, hasta que fue a prepararse una manzanilla. Bueno, como no le daba sueño, preparó muchas manzanillas hasta que se durmió.

Por la madrugada, se despertó con muchas ganas de ir al baño, pero al levantarse tiró la montaña de tazas que dejó en la mesa.
Geronimo no se podía aguantar e intentó pasar sin pincharse lo pies, pero como tenia tantas ganas de ir al baño, no se centró en las taza rotas y se cortó una pata.
Ahora, dolorido, fue corriendo hacia el baño, a coger una tirita para su pata.
Geronimo se le olvidó llamar al fontanero para decirle que el lavabo perdía agua y al entrar al baño se resbaló con un charco de agua, se dio un golpe en la cabeza contra el lavabo y se desmayó.

Geronimo, dolorido por el golpe, despertó por una vocecilla que le resultaba muy familiar. Era su amigo el mensajero rana con un dragón asomado por la ventana del baño pidiéndole ayuda para salvar a la reina del Reino de la Fantasía: Floridiana, también muy amiga de Geronimo.

Geronimo, impactado por lo sucedido, aceptó ir a salvar  a Floridiana.

Y si quieres saber las aventuras de Geronimo Stilton en el Reino de la Fantasía:
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