Había una vez unos padres que estaban muy felices porque iban a tener una hija.

Pasaron los años y la niña estaba muy feliz.
Llegó el momento de cumplir los quince años. La niña estaba en la calle y vio una casa muy vieja. Ella entró. El hombre que vivía en esa casa, sin que ella se diese cuenta, le pinchó en un dedo y se desmayó.
Pasó un príncipe y se enamoró de ella. De repente aparecieron unas hadas, echaron una poción y se despertó.
¡ Y ASÍ TERMINA ESTE CUENTO!
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