
Al día siguiente, unas estaban secas, otras encharcadas. Por la tarde volvió otra vez a la feria con Bat, que no paraba de estornudar. Parecía que tenía alergia a alguna planta. De repente, vieron a un hombre que les dio un bulbo. Cuando llegó a casa la plantó.
A la mañana siguiente, el bulbo había florecido y medía un palmo. Bat seguía estornudando. Tenía alergia a la planta de Leo. Cuando llegaron del colegio, la planta tenía la altura de Rebeca. De repente, la planta se comió a Bat. Los chicos intentaron que lo soltara, pero no lo consiguieron, hasta que Rebeca le lanzó un palo. Después de soltar a Bat, empezó a comportarse como si fuera un perro. Decidieron que Hortensia dos, que es como se llamaba la planta, fuera trasplantada a otro lugar.
Justo cuando vino el camión, Hortensia dos no estaba. Le habían salido como piernas y se había marchado. Entonces miraron en el ordenador para buscar quién era el jardinero que le había regalado el bulbo. Y después pensaron.... decidieron que Bat ...
Y si quieres saber lo que decidieron, coge el libro y a leer.
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