lunes, 13 de marzo de 2017

EN BUSCA DE LA MARAVILLA PERDIDA

   Todo esto empieza un día en que Geronimo estaba en una cafetería y llegó Trampita y le manchó de café, porque vio una Ratoncita absolutamente alucinante, con ojos violeta.

Después la vio Geronimo y se le cayó la taza de café. Intentó hacerle una reverencia, pero resbaló con la leche del café, puso la pata en la tostadora y por si fuera poco, la cola se le coló en el ventilador.

Luego, el camarero lo recogió y le dijo "¿Pero qué haces? Quítame las zarpas de encima" y le echó a la calle y ....... después Geronimo........

Y si queréis saber lo que pasa después, coged el libro y a leer.

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