LA DAMA Y EL VAGABUNDO

  Este libro trata sobre una preciosa historia de amor.

  Era navidad y Jaime y Linda estaban sentados al lado del árbol de navidad, donde había muchos regalos. Linda no sabia por cuál empezar. Disimuladamente, Jaime le dio una gran caja.

  Linda apenas había deshecho el moño de la caja, cuando asomó una hermosa cachorrita cócker. A Linda le encantó el regalo y le puso de nombre Reina. Pronto, la perrita se sintió a gusto en el barrio. Hasta hizo dos amigos: Jack, el terrier escocer y Triste, el sabueso.

   Un día, Reina se enteró de que en su casa habría un evento feliz. Pero como no sabía lo que eso significaba, lo consultó con sus compañeros. Un perro callejero llamado Golfo le explicó que es que iban a tener un hijo, y le advirtió de que cuando un bebe llegaba, el perro se iba.

   Días más tarde, Linda tuvo a su bebé, y Reina se sentía muy feliz por sus dueños. Pero al poco tiempo todo cambió. Llegó a la casa una señora llamada Tía Sara, con sus dos gatos siameses, Sia y Més. Venía para cuidar del bebé mientras ellos se iban de vacaciones.

  Eran dos gatos muy revoltosos. Desordenaron toda la casa y quisieron comerse al canario y a los pececitos de colores. Reina intentó detenerlos, pero en ese momento llegó Tía Sara, que por supuesto, no se imaginó que sus queridos gatos hubieran provocado tales daños. Entonces le echó la culpa a Reina.

  Tía Sara llevó a Reina al veterinario para que le colocaran un bozal, pero como nunca le habían puesto uno, estaba muy asustada. Entonces decidió escabullirse de los brazos de Tía Sara y correr calle abajo. No le importaba a dónde dirigirse, solo quería alejarse lo más lejos posible.

  Al verla pasar, una banda de perros callejeros decidieron perseguirla, hasta que la dejaron arrinconada en un callejón. En ese momento llegó Golfo. Los perros lo reconocieron y huyeron  rápidamente.

  Lo primero que debían de hacer era quitarle el bozal a Reina para que pudiera hablar y comer. Y eso hicieron. En el zoo, el señor castor le pudo roer el bozal y ésta le contó su trágica historia.

   Como ya era tarde y Reina estaba muy hambrienta, Golfo la llevó a un buen restaurante italiano cuyo dueño era su amigo. Allí pasaron una romántica velada saboreando unos deliciosos espaguetis a la luz de la luna.

    A la mañana siguiente, cuando Golfo acompañaba a Reina a su casa ............... la ..... p ...... co........ a.....

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Le recomiendo este libro a las personas que les gusten los libros, la aventura y las historias de amor.