domingo, 18 de junio de 2017

AMIGOS PARA SIEMPRE

Esto era una vez un perro que se llamaba Snoopy y otro que se llamaba Dogy. Bueno, estos perros eran muy amigos y siempre se ayudaban mutuamente cuando se necesitaban.

Llegó un momento cuando Dogy tuvo que dejar a su amigo Snoopy porque su madre se había muerto. Cuando estaba buscando comida al hermano de Dogy, que se llamaba Richard, tuvo que ir al pueblo donde estaban sus familiares para enterrarla.

Snopy quería ir con él, para apoyarlo en cualquier momento que se sintiera solo, pero Dogy no quería porque si no le haría recordar el momento que estaba con Snoopy jugando, mientras su madre se estaba muriendo. Así que Snoopy no pudo ir.

Dogy se quedó en el pueblo un año entero y cuando volvió al pueblo donde estaba su amigo, encontró a Snoopy con otros amigos que ni siquiera conocía.

Cuando vio a Snoopy con otros, empezó a llorar porque Snoopy era el único amigo que era de confianza y el único en no engañar a la gente, pero.... no se quedó con las ganas porque fue a decirle a esos amigos que....

Pero al final resultó un problema, porque esos perritos no eran su amigos, sino sus primos que habían venido para pasar un fin de semana con Snoopy.

Así que vino Snoopy y le dio un gran abrazo a Dogy. Le había echado tanto de menos que casi quería irse al pueblo donde estaba Dogy para jugar con él, como los viejos tiempos.

Y Snoopy y Dogy fueron amigos para siempre y para toda la vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.